Verano 2006...No se por qué, bueno si, siempre me han atraído las islas, perdidas en los océanos. Apuntarlas con el dedo sobre el mapamundi y soñar que algún día acabaré contemplando sus recónditos parajes desde un barco que llega a sus costas. La Gomera, era junto con Hierro las dos islas que me quedaba por conocer de Canarias. Y es que me encantan estas islas. Cualquiera de ellas es un mundo en si mismo, un pais, un continente, tan variadas y preciosas.

8 días en el parador de San Sebastián de la Gomera. La gente decía que estabamos locos por ir tantos días, que en uno sobra para ver toda la isla, pero lo teníamos claro, queríamos viajar sin prisas y disfrutar relajadamente del ambiente, los pueblos y el paisaje.

Tomarnos una cerveza Reina en la plaza de San Sebastian y ver llegar los grandes barcos de las navieras Armas o el Garajonay Expres llagar a puerto es todo un espectáculo que se repite infaliblemente cada hora.

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Las fiestas de t Los órganos